Antecedentes históricos del decreto de creación del municipio Simón Planas

Desde el pasado aborigen y hasta casi finales del siglo XX, las comunidades de Buría, La Miel y Sarare estuvieron vinculadas por distintos lazos con el actual municipio Palavecino. Estas comunidades integraban la extensa comarca cabudareña. Como lo ha registrado la historiografía larense, tanto a Cabudare como a Sarare se les identificó en el transcurso del siglo XIX como las puertas de esta entidad, permanentemente abiertas al horizonte de los llanos centroccidentales. No por casualidad las parroquias de Buría, El Altar y Sarare integraron la jurisdicción del cantón Cabudare, establecido el 1º de mayo de 1844, teniendo por capital a Cabudare, a la vez capital de la parroquia de similar nombre. Buría es el escenario histórico del decano poblamiento de Barquisimeto en el tiempo colonial, a raíz de la fundación hispana ocurrida en mayo de 1552. Buría y su entorno fueron el teatro de acciones de la rebelión liderada por el negro Miguel a mediados de 1553, quien junto a esclavos y aborígenes se enfrentó a los representantes de la corona española. Esta acción heroica, ahogada en sangre, felizmente trascendió en el tiempo.En las cercanías del primer asiento del Barquisimeto colonial, se estableció en el siglo XVIII una comunidad misional con el nombre de Nuestra Señora del Carmen de Buría, otro antecedente de la actual parroquia Buría, capital Manzanita. Mientras que la parroquia El Altar, en el devenir histórico del siglo XIX, cumplió funciones de paso de camino hacia los llanos occidentales. No es de extrañar que El Altar y sus vecindarios fueron “testigos activos” de transacciones de esclavos, ganado, víveres y frutos. En las postrimerías del siglo XIX debido a razones que todavía no se han investigado en profundidad, las parroquias civiles El Altar y Buría se vinieron a menos. Las autoridades legislativas del estado Lara decretaron su eliminación en 1896 y 1897, respectivamente. Las citadas comunidades hasta ese entonces capitales parroquiales regresaron a su condición de simples caseríos y quedan integradas a la parroquia Sarare, situación que persistió por un siglo, al menos para Buría, ya que El Altar lamentablemente hasta sacrificó sus características de centro poblado. Creación del municipio Simón Planas A partir de la aspiración de los vecinos de Sarare, La Miel, Manzanita, Gamelotal, Sabana Alta y el resto de las comunidades de la amplia comarca sarareña, con permanentes diligencias y trámites ante instancias oficiales nacionales, estadales y municipales, el 9 de octubre de 1990 los esfuerzos concluyeron con una densa satisfacción colectiva, la Asamblea Legislativa del estado Lara decretó la creación del noveno municipio de la entidad, recibió el nombre de Simón Planas, manteniendo la antigua eponimia de cuando era municipio del Distrito Palavecino. En 1987 los habitantes de La Miel y comunidades vecinas igualmente festejaron la creación de su parroquia con el nombre de Gustavo Vegas León, en homenaje al fundador de una empresa industrial en esta localidad larense. Buría tras una larga espera de un siglo, en 1991 recobró su jerarquía parroquial. Estaban sentadas las bases político administrativas para que el municipio Simón Planas iniciara el recorrido de su senda de autonomía, con muchos sueños colectivos en pro del desarrollo económico, social y cultural, es decir integral, de esta puerta natural hacia los Llanos y todavía lugar de tránsito con destino a comarcas yaracuyanas, por ejemplo Yaritagua y sus vecindarios.

Prof. Taylor Rodríguez García